Carlos Raul Hernandez
@CarlosRaulHer
Lástima que un buen escritor como Uslar Pietri, sobre todo por «30 hombres y sus sombras» y «Lanzas coloradas» haya sido el operador esencial para la destrucción de la democracia.
Uslar estimuló a una camada de políticos imbéciles, resentidos, y sinvergüenzas a destruir el sistema democrático derrocando a Pérez. Uslar soñaba con ser presidente pero trabajó para lapa.
Uslar
nunca soportó la democracia de clase media provinciana que crearon
adecos y copeyanos. Decía que los brindis del poder eran «la
mierda con la champaña» y la oratoria popular de Betancourt la
llamaba «quincalleria verbal». Escribió un libro
justificando el 4F.
Uslar Pietri, en su casa, estímuló en
infinitas reuniones para derrocar a Carlos Andrés Pérez y a los
adecos, y para aupar un golpe militar. Unió conspiraciones de
izquierda y de derecha. Escovar Salom, Granier, Olavarría con Pablo
Medina, Douglas y Angela Zago.
Él fue el inspirador de los dos
golpes militares. Y escribió después del 4F un libro justificando
sus razones.
Él
estaba herido por el maltrato que sufrió de los adecos entre
1945-48. Luego ellos, arrepentidos, le dieron todos los honores y
favores, embajadas, premios, pero Uslar nunca tuvo la grandeza de
olvidar.
Los
adecos reconocieron su error, le piedieron perdón y le dieron los
más importantes reconocimientos y cargos como el de UNESCO. Le
bregaron el premio Principe de Asturias, incluso. La brega la hizo
Canache Mata.
Uslar
destrozó por odio la grandeza que hubiera podido lograr con la
pluma. Tal vez sería un gran escritor latinoamericano y no lo es por
su afición a la política.
Sinvergüenzas
de AD, Copei, MAS, Causa R, MEP y el calderismo participaron en el
linchamiento de Pérez. Hubieran sido el relevo del sistema. Hoy son
fantasmas.
Creo
que existe la categoría de los «hijos de puta ilustrados».
Si no, hay que llevar la moción a la Academia.
Mi
balance de Uslar: escribió dos muy buenos libros, la democracia le
dio todos los reconocimientos y privilegios y luego pasó a
destruirla. El país de hoy es también su herencia.
Nunca
le perdonaré a Gonzalo Barrios haber permitido a la muerte que se lo
llevara. Si el padre del sentido común hubiera vivido, el CEN de
idiotas de AD no hubiera votado la destitucion de Pérez en el
Congreso. El programa económico hubiera seguido y hoy seriamos
Kuwait.
«Sembrar
el petróleo» es una frase obvia y de cualquier manera la
democracia lo hizo en escuelas, universidades, financiando empresas
privadas, etc. Llegamos a ser el país más moderno de Latinoamérica.
En
la pobreza cultural de Venezuela, donde no hay Borges, Cortazar,
Sabato, Neruda, García Márquez, Mutis, sólo tuvimos enanos. Y
Uslar hizo dos buenos libros (gracias a Gallegos existimos).